El Instituto Geofísico del Perú (IGP) elevó a nivel de alerta naranja el estado del volcán Sabancaya, ubicado en la provincia de Caylloma, a 70 kilómetros al noroeste de la ciudad de Arequipa. La medida responde al incremento significativo de la actividad eruptiva registrada en los últimos días.
El pasado 13 de septiembre, el volcán emitió una fumarola que superó los 5 000 metros de altura, acompañada de la dispersión de cenizas y flujos piroclásticos. Estos eventos han motivado al IGP a reforzar su vigilancia sobre la zona, que se mantiene bajo monitoreo constante las 24 horas del día.
Según Katherine Vargas, coordinadora del Centro Vulcanológico Nacional (CENVUL) del IGP, la alerta naranja indica una intensificación sostenida de la actividad del volcán. Esto se traduce en mayor sismicidad, explosiones frecuentes y emisiones continuas de ceniza.
Recomendaciones ante la dispersión de cenizas.
El IGP emitió una alerta preventiva por dispersión de cenizas dirigida a los distritos de Huambo, Huanca y otros centros poblados cercanos, los cuales podrían verse afectados por la caída de material volcánico en los próximos días.
Las autoridades recomiendan a la población:
• No acercarse a menos de 12 km del cráter.
• Mantener puertas y ventanas cerradas.
• Usar mascarillas o paños húmedos para cubrir nariz y boca ante la caída de ceniza.
• Proteger fuentes de agua y alimentos del contacto con material volcánico.
Por su parte, la Gerencia Regional de Salud (Geresa) Arequipa se mantiene en estado de alerta sanitaria para responder a posibles afectaciones respiratorias y oculares en la población.
Contexto histórico: un volcán en actividad continua. El Sabancaya es considerado el segundo volcán más activo del Perú, después del Ubinas. Desde que reinició su proceso eruptivo en noviembre de 2016, ha mantenido una actividad moderada pero constante. Solo en los últimos meses, el IGP ha registrado decenas de explosiones semanales y emisiones de gases y cenizas que afectan a comunidades aledañas.
El monitoreo permanente realizado por el IGP permite anticipar posibles escenarios de riesgo y coordinar acciones con Defensa Civil y autoridades locales.